Rechazada

Capítulo 21 

+5 Perlas 

El pensamiento de la muerte golpeó a Gloria. Entonces, la chica llamada Mica apareció de nuevo en su 

mente. 

Recuperó la conciencia al instante. 

No podia morir asi, porque aun necesitaba cumplir el deseo de Mica. 

Gloria abrió los ojos lentamente, y la habitación estaba brillante como de costumbre. 

Gloria era como una muñeca de trapo sin temperamento. Era vilipendiada cruelmente y nunca respondía. 

Sin embargo, subestimó a esas chicas. 

Ruby dio un paso adelante y empujó a Gloria, mientras dijo con desden: “¿Por qué finges ser miserable? Si estas trabajando aqui como una chica de compañia, no pongas una cara inocente. ¡Cuando estabas suplicando misericordia ante esos invitados ayer, no eras tan elevada!” 

Después de decir esto, Ruby seguia insatisfecha. Extendió su pie y le dio una patada a Gloria. 

Las piernas de Gloria ya estaban heridas, por lo que cayó al suelo. 

“Ruby, sé más cuidadosa con ella. ¿Cómo puedes patearla de esa manera?” le dijo alguien. No importaba cuanto disfrutaran burlándose de ella, siempre era de forma verbal y no la golpeaban. 

Ruby dijo con confianza: “No use mucha fuerza Simplemente, ella es muy débil!!” 

Bufo friamente y pateó a Gloria una vez más como si fuera basura. “¡Deja de fingir. ¡Levántate! ¿Estás tratando de parecer una delicada princesa o Cenicienta? Es una lástima que seas tan fea. Te pareces más a una bruja malvada!” 

Después de que Ruby terminó sus palabras, se dio la vuelta y mostró una sonrisa desagradable a las otras chicas de compañía detrás de ella. “¿Acaso acabo de patear a una persona al suelo? ¿O pateé a un perro? Realmente no puedo decirlo. 

Todas estallaron en risas. “Ruby tiene razón. Ella no patearia a una persona asi. Estaba pateando a un 

perro.” 

“Gloria, deberias ladrar.” 

*¿Por qué no te arrastras por el suelo como lo hiciste en la habitación privada ayer?” 

Gloria lucho por levantarse del suelo mientras las burlas y los insultos la golpeaban una y otra vez. 

¿Qué estás haciendo?” 

La puerta se abrió de repente, y entró ChristineElla no esperaba ver tal escena en el momento en que abrió la puerta. Gloria estaba siendo claramente intimidada, 

Christine estaba tan enojada que su rostro se volvió sombrío, Miró a todos. Y gritó furiosa “¿Qué están haciendo aqui? ¡Vuelvan a trabajar!” 

Esas chicas presuntuosas ahora encogieron el cuello y salieron corriendo. 

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13-24 Wed, 3 Juler El M. 

Capitulo 21 

+5 Perlas 

Ruby parecía recuperar su confianza después de intimidar a Gloria. Estaba eufórica y se atrevia a desafiar a su jefa 

“Christine, solo estábamos bromeando mientras descansábamos. ¿Por qué haces tanto escándalo?” 

“¿Así es como se entretienen durante los descansos? Intimidando a otros?” La voz de Christine se volvió 

fria. 

Una de las chicas de compañia que estaba cerca de Ruby le tiró suavemente de su brazo, porque podía escuchar la furia en el tono de Christine. 

Sin embargo, Ruby no lo veia asi. Miró a Gloria con indiferencia y dijo: “¿Estás hablando de ella? No creo que pueda compararse conmigo. Ella es solo una perra…” 

Con un golpe, Ruby fue interrumpida, Christine la abofeteó con fuerza. 

“¡Christine! ¿Por qué me haces esto?” Ruby se cubrió la cara, y las lágrimas brotaron de sus ojos, mientras que la miraba con miedo y enojo. 

“En el Club Fittro, ninguna chica de compañía me desobedece “, dijo Christine mientras levantaba la mano de nuevo. 

Ruby y las demás estaban horrorizadas al notar que la mano de Christine comenzaba a transformarse. Se volvía más grande, sus dedos se alargaban y el dorso se cubría de pelo grueso. De las puntas de sus dedos se asomaba unas uñas al 

afiladas como cuchillas. 

“Ruby, la próxima vez, tu cara no solo dolerá. Después de eso, la mano de Christine volvió a ser una mano. humana. 

Cuando Ruby imaginó que esas uñas afiladas le dejarian cicatrices horribles en la cara, tembló de miedo. 

Christine era despiadada. Aunque nunca lo habían presenciado, todos lo habían oído antes. Nadie deseaba enfrentarse a ella. 

Ruby salió corriendo del salón a toda prisa. 

“¿Eres tonta? ¿Por qué no te defiendes cuando te intimidan?” Christine corrió rápidamente hacia Gloria y la ayudó a levantarse. Todavía estaba enojada. 

No soportaba ver a Gloria siendo intimidada. 

Vio las heridas en el cuerpo de Gloria y cómo los invitados se habían burlado de ella, sintió enojo, pero Gloria nunca había llorado de dolor ni derramado una sola lágrima. 

Christine no pudo evitar ser amable con Gloria. Pues ella y Gloria compartían experiencia similares. 

“Christine, ¿tienes algún trabajo para mi ahora?” Preguntó Gloria 

Christine se quedó atónita. Miró a Gloria y suspiro impotente, Tomate un día libre. No creo que estés en condiciones de trabajar.” 

“Estoy bien.” 

Christine insistio. “Hoy no hay trabajo para ti. ¿Cómo puedes trabajar todo el tiempo?” 

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Capitulo 21 

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“Está bien, me sentaré aquí y esperaré“, dijo Gloria. “Christine, si los invitados me necesitan, avísame. Sé que no me veo bien, pero estoy dispuesta a hacer cualquier trabajo, por sucio y agotador que sea. Si otros se niegan a complacer a los invitados, yo lo haré.” 

Gloria nunca habia considerado vender su cuerpo. En su opinión, estaba a salvo con su apariencia poco atractiva. 

“Olvidalo. Haz lo que quieras.” Christine negó con la cabeza y salió del salón. 

No planeaba darle trabajo esa noche, menos después de eso, 

Cuando Gloria salió del baño en el tercer piso, alguien la arrastró a una habitación privada. 

“Señor White, esta es la Gloria de la que hablé.” 

Gloria vio a Yuna hablando con un hombre de mediana edad en el sofá con una sonrisa encantadora. 

Gloria conocía a Yuna. Era la mujer que besó a Derrick en el ascensor de carga la última vez. 

“Gloria, ven aqui. El señor White dijo que quería invitarte a una copa.” 

Gloria negó con la cabeza. “Soy alérgica al alcohol.” RêAd lat𝙚St chapters at Novel(D)ra/ma.Org Only

La cara de Yuna se volvió fría de inmediato, y gritó: “Gloria, ite estás burlando del señor White? ¿Cómo te atreves a rechazar su oferta?” 

Gloria echó un vistazo al hombre al lado de Yuna, y él lucía infeliz. 

Gloria solo pudo morderse la lengua y decir: “Señor White, es cierto. Soy alérgica al alcohol. Casi muero una vez. Si bebo y no aguanto el licor, de todos modos te disgustaré.” 

Aunque el hombre no parecía contento al escuchar las palabras de Gloria, no le pidió que bebiera más. Sin embargo, no tenía la intención de dejarla ir tan fácilmente. 

“¿Entonces qué puedes hacer?”